Si engrasas el molde, el papel se quedará en su lugar.
Coloca el molde en el centro de una hoja de papel parafinado. Haz un corte en diagonal desde cada una de las esquinas del papel hasta las del molde.
Dobla el papel por los cortes para facilitar su colocación en el molde.
Solapa las esquinas del papel y presiona para que se sujeten bien. Engrasa el molde y espolvoréalo con harina, tal y como se indica en la receta.